James Franco siempre se caracterizó por twittear cosas extrañas. Videos de él criticando su realidad saltaban en la red social… Cosa que nos encantaba, pero a otras personas les incomodaba.
El actor escribía comentarios críticos que afectaban a sus patrocinadores, y finalmente decidió cerrar su cuenta por la presión que recibió.
Franco afirmó que él quería usar su Twitter para publicar lo que le diera la gana, pero pronto se dio cuenta de que no podía… O si lo hacía, iba a tener un costo que podría resultarle bastante alto.
“Se acabaron los medios sociales. Mi pensamiento era ‘este es mi Twitter, puedo hacer lo que quiera’, pero ciertas compañías con las que trabajo contactaron conmigo (para hablar) sobre lo que escribía”, explicó Franco a politico.com
Franco se hizo popular en Twitter por sus polémicos tweets. En uno de ellos, el actor de 127 horas se metió con Bruce Vilanch, guionista de la gala de los Oscar porque éste criticó la manera en que presentó dichos premios.
Después de lo ocurrido, Franco cerró su Twitter y aseguró que prefiere centrarse en desarrollar la creatividad para escribir y olvidarse de los medios sociales que le hacen perder el tiempo. “Todos tenemos una hora o dos libres al día, que pueden usarse para Facebook o para escribir”, sentenció el actor..
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